Con el fin de conocer la peligrosidad de un siniestro de este tipo y su mejor extinción, los incendios podemos clasificarlos en 4 tipos: A, B, C,y D.
_ Clase A: incendios generados por madera, tejidos, goma, papel y algunos tipos de plástico.
_ Clase B: incendios producidos por gasolina, aceites, pinturas, gases y líquidos inflamables y lubricantes.
_ Clase C: incendios que implican cualquiera de los materiales de la Clases A y B, pero con la introducción de electrodomésticos, cableado o cualquier otro objeto que recibe energía eléctrica, en la vecindad del fuego.
_ Clase D: incendios de metales combustibles, como el sodio, el magnesio o el potasio u otros que pueden entrar en ignición cuando se reducen a limaduras muy finas.
En una instalación es muy importante que los lugares de mayor riesgo, estén claramente identificados, asi como también el lugar en el que se encuentran los extintores respectivos para cada tipo de incendio, para así proceder a un rápido actuar frente a estos lamentables sucesos.